DIABLES DEL BARRI GÒTIC

Los Diables del Barri Gòtic nacen en 1984 como Diables de Sant Roc, son, por tanto, una de las formaciones más veteranas de baile de diablos de la ciudad de Barcelona. Su presentación oficial, sin embargo, y su bautismo de fuego fue para las Festes de Sant Roc de la Plaça Nova. Fueron sus padrinos, y responsables de su bautizo de fuego, el Ball dels Diables del Clot y la Colla de Diables de Sants. Un año después, y siguiendo la costumbre de otros grupos barceloneses de identificar la colla con el barrio, pasan a ser llamados Diables del Barri Gòtic. Conservando el antiguo nombre de Diables de Sant Roc para su intervención procesional dentro del Seguici del Sant, cada 16 de agosto. En esta representación hacen una función similar a la de los diablillos de Corpus Christi.

Los primeros años actúan como un baile de diablos clásico inspirados en los Diablots de la processó del Corpus barcelonés; pronto pero, evolucionan hacia el llamado correfoc de modelo barcelonés y el espectáculo pirotécnico. Solos, o acompañados por la Víbria de Barcelona y /o la Arpella, sus correfocs y finales espectaculares son sinónimo de fiesta, de tradición y de innovación, de cultura del fuego en la más pura esencia festiva.

La Colla de Diables del Barri Gòtic ha enriquecido la tradición del fuego con la construcción de bestiario. En 1989 se recuperó el Àliga de la Barcelona Vella que hasta el 1992 fue ígnea - lanzaba pirotecnia por el pico y por la cola-. En 1993 nació la Víbria de Barcelona, ​​el dragón hembra, que forma parte del Bestiari Històric de Barcelona y es integrada en el Seguici Popular de la Ciutat. Solos, o acompañados por la Víbria de Barcelona y / o la Arpella, sus correfocs y finales espectaculares son sinónimo de fiesta, de tradición y de innovación, de cultura del fuego en la más pura esencia festiva.